domingo, julio 05, 2009

Día de elecciones en México

Foto: Cecilia Caloca (gracias nena, sin tus manos no lo logro)

Enseñé mi credencial y anulé mi voto. Con la mañana de domingo medio nublada y soleada, disfruté más salir de casa. Fui a votar junto con mis padres. Tuvimos una previa charla sobre las formas de participar y estuvimos de acuerdo, sin un común debate entre ideologías políticas; de anular el voto. Ninguna de las 8 opciones nos llenan, no nos satisfacen por el pasado ni nos motivan para un futuro. El presente esta desajustado.

Sabemos que anular no es la única forma de participar en esta democracia. Exigir, denunciar, educar, participar, cooperar, discrepar y resistir; son verbos que inspiran. El grito social “para políticos nulos, votos nulos” ha subido a altos porcentajes de las votaciones, con una propuesta más allá de la protesta, cocinándose. Entre las iniciativas se señalan: Disminuir de 500 a 300 los diputados, eliminar plurinominales, reducción del financiamiento a partidos, candidaturas independientes, revocación del mandato, referéndum.

Foto: Patricia Karenina

El periodista y analista político, Rubén Martin jugueteando con los tiempos, calculó que si un ciudadano sólo participa en las elecciones; su acción es de .0019% en la vida “democrática” del país.

¿Con eso basta?

A muchos habitantes mexicanos, ni siquiera les interesa tomar o cuestionarse qué hacer con esta pequeña forma de participar. Pero para las voces ciudadanas que se han posicionado en el espacio público, con otras propuestas, con otras quejas y alternativas; señalan que no es suficiente.

Llegué a mi casa. Escuché la radio por dos horas. La cobertura especial del día electoral era el programa permanente. Saber los conflictos en algunos distritos daba un panorama que algo sucedía en los espacios donde ejercí la participación política más diminuta que había experimentado. Un par de minutos y tu voz se vuelve a silenciar.

Foto: Patricia Karenina

Por la tarde, Salí a pedalear. Al tiempo que cerré la puerta, vi a mi vecina abrir la puerta de su casa. Buenas tardes –saludé y le pregunté- ¿llega de votar?
-no- respondió con desgano –no voy a ir-
-se abstiene. Ah esta bien, ¿su razón es porque no cree en el sistema?
O ¿por qué es?- pregunté curiosa.
-No les creo. No iré porque no me gusta ninguno- señaló.
-¿conoce la opción del voto nulo?-

Su rostro de interrogación me hizo acercarme a explicarle. Después de un par de preguntas de su parte para confirmar lo que escuchaba, me dijo que iría a anular su voto. Mi duda crece –hasta que la vea- si realmente fue a hacerlo. Dudo que dos minutos de charla convenza a salir de casa, formarse, buscarse en la lista, rayar un papel y dejar que le pinten su dedo pulgar; s uno tenía visualizado quedarse en casa después de haber estado en la calle.

Foto: Patricia Karenina

Hay mucha renuencia, indiferencia y hasta arrogancia hacia los que “no hacen bien su trabajo” pero que ni siquiera hay conocimiento de qué se trata su trabajo. Aquí en la democracia la obligación es de las dos partes. Alicia González, maestra de licenciatura de la Universidad de Guadalajara, menciona que la responsabilidad del gobierno en generar interés de participar en la ciudadanía, no es el único faltante ya que al ciudadano también les hace falta informarse. “Algo tenemos claro. El país no tiene futuro sin nosotros” exclamó esta maestra de historia, quien también anuló su voto.

Llegué a las 4:10 al Parque Revolución en el centro de Guadalajara. Desde días previos fui invitada por internet y móvil, a charlar con más personas que también anularon su voto. Fidel, el candidato de la perrada fue el primero en caminar por las rojas banquetas. Entre camarógrafos y su dueño, babeaba y observaba cualquier movimiento a su alrededor.

Foto: Patricia Karenina


Bicicletas, paseantes, niños, danzantes, parejas por aquellos jardines y asfalto. La tarde de domingo se diferenció a uno ordinario por los carteles recargados en árboles sobre el voto nulo, por la lona para la comida de los capacitadores de la oficina del IFE frente al parque rojo, y por el WV del voto nulo con su rola de moda a todo volumen.

“Si detrás de cada presa estás tú
Si en cada agandalle estas tú
Como te voy a votar
Mi voto voy a anular”

Comenzaron a arribar más ciudadanos. Entre la timidez, la curiosidad y el desconocimiento de los otros asistentes; poco a poco, nos acercamos alrededor de cincuenta, al centro del parque. “yo crucé el voto de lado a lado” nos platicó María Gracia, habitante del distrito trece. Sentados en una banca al estilo Luis Barragán, algunos que nos encontramos en aquel sitio escuchamos las opiniones de quien tomaba el inexistente micrófono.

Foto: Patricia Karenina

El dedo anular también estaba manchado. Representa más que el pulgar, la decisión ciudadana. Algunos portaban con orgullo dicha insignia. Diversas personas se acercaban, preguntaban y mientras llegaban más, algunos otros se alejaban disfrutando el atardecer de domingo. Las charlas, el picnic, el sahumerio de copal y las lonas informativas y alusivas; continuaron por más tiempo que yo. Regresé a casa alrededor de las siete y media.

Escuché por radio que las casillas cerraban en todo el país. Campeche, Nuevo León, norte de Jalisco. Estudios estratégicos para el desarrollo de la Universidad de Guadalajara, arroja porcentajes de sus encuestas aplicadas en Guadalajara y Zapopan. El Partido Revolucionario Institucional [PRI] está arriba por 6% o 4% del PAN. El PREP comienza a contar. En Guadalajara, El Partido Acción Nacional está por debajo de un 48% del PRI. El Verde ecologista [PVEM] tiene un 6.39 % mientras que el voto nulo grita en un 5.28% Después le sigue el voto nulo. Son las 10:30 PM de este domingo de elecciones.

Foto: "el voto es libre y secreto" señala quen tomó esta foto. :)


Dos datillos:
12 mil millones de pesos, nos costó el proceso electoral
Existieron 23 millones de promocionales de los partidos políticos