sábado, marzo 22, 2008

Intolerancia bajo la piel de la diversidad

Foto: Karenina

Las personas caminan, se distraen compran. Cargan distintos colores, distintas miradas. Aquí donde la diversidad de la sociedad tapatía confluye bajo un mismo piso, se dio cita al rechazo de una cultura, de una moda o de unas personas que se nombran Emos. Son una expresión urbana, un grupo, una moda y para muchos, una razón para convocar a golpearlos en distintas partes del país.

En Guadalajara la cita para este cometido se dio en el tianguis cultural, territorio de la diversidad, la juventud y la cultura según sus años de existencia. La invitación a la disputa frecuentó buzones de correo electrónico, voces y flyers de la ciudad desde hace semanas mientras que en prensa y radio desde un par de días, David de Anda del consejo administrativo del tianguis cultural invitaba a una mesa de diálogo entre culturas que se daría el mismo día de la polémica cita violenta.

Y ahí estaba, con el micrófono en mano bajo la lona acostumbrada para los grupos de rock, de Anda invitaba a “la banda” a no meter violencia al lugar. -Es nuestro espacio que ha costado mucho, no incluyamos la violencia que ella es la única que no es invitada aquí” gritaba. Los punketos sentados bajo la sombra del árbol miraban, algunos mofándose se reían entre ellos; darketos observaban serios, su silencio impregnaba mi mente de dudas.

-¿Tú sabes que sucede aquí?- le pregunté a un vendedor de artesanía. –pues a mi me dijo un amigo que un tal Anticristo es el antiemo que convoca a golpearlos. -Yo creo que es un pleito entre emos y punks como los cholos que han tenido problemas y se dividen de los demás.- comenta David, el Camello quien se describe como rocker. –La gente ignorante no sabe distinguir. A mi me han confundido con Emo- comenta su amigo el Mega Rocker de la WC -pues si pareces Emo- le dice David quien le golpea en la cabeza riéndose.

Foto: karenina. Chico punk, David de Anda y chico Emo

“Ellos no vienen de una variación musical, vienen de la moda creada por grupos de MTV” aseguró el metalero Roberto Vargas, mientras que dos chicas que se describían como normales describieron -Dicen que son el cáncer de la sociedad pero yo digo que Emo es una forma de expresarse-, -Yo sé que están tristes y tienen problemas en sus familias.-comentó la otra.

El Tianguis Cultural de diversidad por naturaleza y con la sangre de personajes urbanos que pretenden sobrevivir, se ha visto amenazado por radicalismos de propiedad cultural y expresiones instintivas de disgusto sobre un miembro de su comunidad. ¿Acaso la creación artística no se da evolutivamente como la historia de la música testifica?...

Foto: Karenina. Emos en el Tianguis cultural

La mesa de diálogo comenzó invitando a la no violencia y al diálogo sobre las culturas que existen en el Tianguis. Una chica que se describió como Emo trató d erelatar su buena experiencia en una manifestación pero mientras más gente se reunía, más aumentaba el barullo, insoportable para entender la voz desde las bocinas.

Existieron intentos de comentar posturas afines, tolerantes o respetuosas sobre este fenómeno pero los gritos ganaron y las votaciones sobre no hablar mas del asunto ganaron por democracia.

Foto: Karenina "Somos una familia grande, no nos peleemos" gritaba aquel chico

Entre una charla que tuve con Eduardo, un chavo vestido de mezclilla con pulseras de colores tipo candy ravers me comentó -Para mí la violencia esta mal pero los Emos me caen “gordos” porque se hacen daño, tienen problemas y no salen adelante y su moda es llamar la atención. Decirles de cosas es divertido pero golpearlos no”.

En el Space de Norbert Schwartz describe las culturas que viven en el Cultural. Referente a los Emos analiza “el punto de partida filosófico del movimiento emo es la crisis de sentido que se dio en los noventas. La vida (de nuevo) no tiene sentido. El nihilismo que en los setentas generó el movimiento punk y a finales de los ochentas el grunge (derivado de la generación X) recibe una nueva respuesta en los dosmiles” escribe “Pero no todos los emos son tristes, así como no todos los darketos son depresivos o suicidas…”

Dorian habitante de Tonalá de 18 años asegura que no es Emo, que le caen bien y la gente que no acepta las diferencias como ellos, cierran oportunidades de conocer más “la cultura es conocimiento y no hay que cerrarnos. Si nos preocupan los Emos pensemos, si no tienen raíces van a extinguirse, pero respetemos”.

David de Anda asegura que un problema así no se resuelve en un sábado. -Seguiremos intentándole, sabemos que será difícil reunir perspectivas diversas pero para eso existe también el Tianguis, para el respecto de las culturas-.

Foto: Karenina

Todas las opiniones me confirmaban la diversa piel del tianguis cultural donde existen todo tipo de emociones y sensaciones. Los Emo desde mi perspectiva iniciaron en una moda que aterriza en un estilo de vida. Su construcción de identidad parte de la multiculturalidad que fluye en el mundo actual glo-ba-li-za-do; pero la dependencia de costumbres en las culturas de antaño se han visto dañadas por sujetos de excesivos sentimientos.

La emoción desbordada es la otra parte de su peculiaridad. Asimilar que no existe nada más obvio que el absurdo de vivir es su razón de experimentar todas las maneras de vida, los sentimientos y por que no, las flagelaciones. La bipolaridad es instintiva, la moda la inspiración y su modo de vida hasta que la emoción lo disuelva.

Yo no entiendo las razones de este fenómeno, las comprendo como existentes; las investigo y después opino… ¿alguien más cree opinar?


Foto: Karenina. Dorian opinando

sábado, marzo 01, 2008

La locura pedalea

Hace menos de un mes, una serie de “locos” cruzaron por nuestra ciudad bajo un mismo interés: cambiar percepciones.

La curiosidad, el arte y la ilusión son alientos de naturaleza humana. Cuando nos encontramos frente a un individuo capaz de accionar sueños que la mayoría de nosotros mantenemos en la imaginación –o atamos en disimulo- nuestra curiosidad se activa, y queremos saber cada vez más de aquella persona que calificamos como “loco”. Son un punto distante, cercano y representante de todo lo que queremos llegar a sentir: libertad.

Damián, químico argentino que va camino al fin del mundo por le Continente Americano, regaló a un grupo de tapatíos su experiencia cargada de un millón de inspiraciones. Su equipo de viaje cabe en cinco maletas que carga en la bici con un total aproximado de 100 kilos. Reconocer posible un viaje así, era para mi imposible hasta la presencia de Damián en Guadalajara. Casualmente su visita cruzó con el festival por la movilidad de Ciudad para Todos que lo celebramos en el parque Metropolitano. Las 5 maletas de su viaje, se extendieron en un espacio de 2 x 2 para mostrarse ante los curiosos. Casa de campaña, mapas, ropa, botiquín y hasta la olla del agua para el mate.

Su pasión por recorrer el mundo mantuvo sus brazos abiertos a la experiencia. Mientras más regalaba su locura con quien cruzara, más tejía buenos recuerdos en su sonrisa. A su salida de la ciudad rumbo al sureste del país, Damián se despidió de nosotros mientras montábamos unas pancartas en los puentes peatonales de López Mateos. Sonrisas, buenos deseos, consejos. Es un gusto conocer tu locura.

-¿Pero qué hacen?- cuestionó un señor al ver una lona amarilla de 6 metros que decía: viaducto + puente ≠ movilidad. ¿Hasta cuándo van a escuchar a la ciudadanía?

–No estamos en contra del puente- le comenté al señor –estamos a favor de una movilidad incluyente y el sumarle al peatón 80 metros para cruzar un tramo de cuarenta, es una falta de respeto legal y a la integridad del individuo. Las formas de construcción de esta ciudad es incluir diversas modalidades de transporte (bici, transporte multimodal, banquetas para peatones) no un puente para que el dueño motorizado pase por su ciudad mientras que su creador, el ser humano baja de un puente y se topa con una seria de automóviles estacionados en su camino. El señor pensó un poco y dijo: -¿Entonces por qué no lo hacen?...

El puente peatonal que está literalmente sobre la calle Virgen con sus empinadas rampas obstruyó uno de los carriles para obtener el acceso-descenso de los peatones. Al rededor se encontraba el policía del banco mirándonos curioso, la banqueta obstruida por un ya común estacionamiento de automóviles en batería y del otro lado Damián dando su última entrevista al Occidental. Después subió al puente y se despidió con la locura atada en el corazón y la sonrisa en el despegue en pedales. Que locura tan motivante, que camino tan provocador…

Léanlo en: www.jamerboi.com.ar

Días después exactamente el 14 de febrero, con la música como estilo de vida y el camino al sur como destino, los Ginger Ninjas presentaron su locura mágico-musical en pedales. 14 sujetos provenientes de diversas fronteras compartieron el objetivo del líder Kipchoge: un mensaje, un destino: Tierras yucatecas que resguardan arquitectura maya.

Descalzos, con sombreros de paja, cascos para la bici, pelucas, ropa de colores, manta y mezclilla; incorporan a su público para bailar. Acompañados de una dulce y sensual voz uruguaya invitan cambiar el mundo desde nuestras manos. Chelo, guitarras, batería y bajo se conectan al amplificador de mil watts recargado por energía generada al pedalear.

La protección al ambiente es la acompañante de honor, motivadora de locuras experimentales en bicicleta. Miles de kilómetros los dividen de su inspiración del viaje, al logro de su locura. 5 músicos que antes de partir a lo Ginger Ninja reconocían su vida como la de cualquier ser humano con sueños y locuras manifestadas a un nivel básico de realización.

¿Qué se necesita para pedalear locuras? Acompañarte de tus talentos, agudizar tus aprendizajes y estar preparado para sorpresivas experiencias.

¿Hasta dónde la locura prolifera sólo en un campo de concentración de sueños? Hasta que las murallas construidas por el miedo nos deje de alimentar con costumbre. Rompamos la frontera de la percepción soltando la locura a un alto vuelo.

Foto: Giorgio Viera