lunes, mayo 25, 2009

Pedalear sin influenza

Nota publicada en el Informador Sábado 23 de mayo.
Por Patricia Karenina Casarín

La vía recreativa fue uno de los eventos más afectados a causa de la contngencia sanitaria y las opiniones al respecto varían mucho


GUADALAJARA, JALISCO.- Los días de alerta sanitaria fueron como un largo domingo. Calles solitarias, locales cerrados y poca gente. Fue la mejor oportunidad para pedalear tranquila por una ciudad amable durante dos semanas. La única distracción que me aterrizó a la realidad, eran rostros a medio cubrir de azul o blanco. Pareciera que la influenza atacó más reuniones masivas que seres humanos, pensé. No sólo cerraron cines y teatros, también se canceló el paseo mensual ciclista de mayo, la Vía Recre-activa por dos domingos, y se suspendió el II Congreso de Ciclismo urbano que se realizaría en Guadalajara a inicios del mes.

Proclive a ser portadora del virus por lo humana que soy, pensé en aumentar mis defensas, así que encontré el pretexto perfecto para andar en bici. No fui la única. Convencida de que las razones para cancelar actos masivos al aire libre como el paseo mensual eran confusas, decidí preguntarle a algunos paseantes.

Entre los ciclistas, la opinión sobre la influenza es renuente. Aquel segundo domingo sin Vía recre-activa, me topé con Gabriel Navarro, ciclista de la colonia Camichines. Para él, es mejor hacer deporte cuando hay virus, y prefiere evitar la televisión porque asusta a su hijo de 12 años: “Yo creo que evitan que nos reunamos y no tanto por situación de sanidad sino por una situación política” comentó. Manuel Vargas conocido como “Don Mai”, cada domingo pedalea 54 kilómetros desde las seis de la mañana. A las ocho cuando inicia la Vía, ve varios ciclistas esperando el cierre de calles. Aquel domingo 10 de mayo había varios esperando confundidos porque no veían que algo sucediera. Don Mai también cree que es mejor pedalear, a encerrarse y escuchar las malas noticias, por eso no ha faltado a ningún paseo nocturno.

Foto: Hector Skinfill

En Guadalajara desde hace más de un año, se realizan paseos semanales convocados por varios grupos ciclistas. La influenza en estos encuentros nocturnos pasó de largo, al menos, eso cuenta Yeriel Salcedo miembro de Bici 10. Como cada miércoles a las 22 horas llegamos a la Plaza de la República -avenida México casi Chapultepec- para disfrutar el paseo colectivo. El primer miércoles de influenza -29 de abril- la asistencia bajó hasta 150 personas, pero la siguiente semana en plena contingencia sanitaria, regresaron los 400 participantes”, aseguró Yeriel.

“Sobrevivientes a las malas influencias, regresamos a la normalidad” señaló Bernardo Lizardi otro voluntario de Bici 10. En el caso del paseo del lunes, los aferrados ni se dejaron por la influenza, ni por las lluvias. Pedaleando por Vallarta en pleno regalo de Tláloc gritaban y chiflaban. Algunos automovilistas miraban fijamente el pequeño convoy de 12 personas, mientras que otros con su claxón se sumaban a la alegría sobre ruedas. El paseo del viernes también anduvo de fiesta, mientras que los martes en Zapopan el grupo Mi Bici-o, no dudó en seguir. Únicamente el paseo del miércoles a las once, suspendió el 29 de abril su recorrido y continuaron con y sin tapabocas el 6 de mayo.

Los voluntarios de Gdl en Bici, organizan el paseo temático mensual desde abril del 2008 donde reúnen más de cuatro mil ciclistas cada primer jueves del mes. La contingencia sanitaria provocó el silencio de esta costumbre; pues el paseo oficialmente se canceló. “No podíamos salir a sonar nuestros timbres entre las luces de la noche, no podía creer que mi dosis de bicis no la iba tener este mes”, escribió un bicicronista en la página de Bici10. Como él, más de 70 personas, entre aferrados y desinformados; se encontraron en el Parque Revolución aquel jueves y pedalearon más de 14 kilómetros.

Con influenza, lluvia o paseos cancelados, los aferrados al pedal no nos bajamos de la bici. Mientras el virus cobra víctimas esporádicas y eventos organizados, la ciudadanía sigue cuestionándose cuándo el virus tocará su realidad más allá de los medios masivos. Por lo pronto, sigamos nuestras vidas en dos ruedas.

1 comentario:

Sr. Renne Piraña dijo...

vistanse de virus, que tambien si no fueran tan livianos, viajarian en bicis al por mayor.